La reciente aprobación del dictamen del Proyecto de Ley de Servicios de Atención al Cliente (SAC) en el Senado, con la mayoría del PP, marca un momento clave en la regulación del juego en España. La supresión de la Disposición final Cuarta, que buscaba modificar la Ley del Juego, que fue enmendada por el Grupo Parlamentario Popular, como una medida necesaria para mantener el enfoque del proyecto en la atención al cliente.
Este desarrollo resalta la importancia de la regulación del juego en el contexto legislativo actual y cómo las decisiones en el Senado pueden influir en el futuro de la industria. Ahora, el Congreso tiene la responsabilidad de decidir si ratifica la supresión del Senado o si reintegra los cambios originales sobre la regulación del juego.
La decisión del Congreso será crucial, ya que podría afectar no solo a la legislación vigente sobre el juego, sino también a la forma en que se gestionan los servicios de atención al cliente en este sector. Si el Congreso opta por mantener la supresión, se podría dar un paso hacia una regulación más clara y centrada en la atención al cliente, sin interferencias de otros ámbitos legislativos.
